Aquellos que
viven en el mundo occidental individualista, les
cuesta imaginar la cultura del Nuevo Testamento en
la cual era normal vivir con los padres, sirvientes
y otros trabajadores (oikos). Estamos
acostumbrados a las familias de padre, madre e
hijos.
Sin embargo, el
mundo antiguo no tenía ni siquiera una palabra a lo
que llamamos el “núcleo familiar.” Sólo encontramos
la palabra familia extendida. La cultural
normal para la iglesia primitiva se centró en el
oikos (hogar o familia extendida), que es la palabra
griega que significa hogar, casa o familia
extendida. Dios usó esos vínculos naturales (oikos)
de relaciones para penetrar en el mundo romano a
través de la multiplicación de iglesias de las
casas.
La forma en que
la iglesia primitiva llegó a la gente a través de
las relaciones en los hogares ayuda a la iglesia de
hoy en día ha entender que las personas ya están
agrupadas en las relaciones naturales (oikos). Esas
relaciones naturales incluyen la familia, amigos,
compañeros de trabajo, y cualquier persona que se
contacta regularmente. Dios usa los enlaces
naturales (oikos) para difundir su mensaje del
evangelio a través del ministerio de casa en casa.
Cada creyente
debe identificar a estos contactos de oikos
(relaciones naturales) y luego comenzar a orar
diariamente por cada uno de ellos, pidiendo a Dios
que abra los corazones al mensaje del evangelio. El
siguiente paso es el de servir y bendecir a estos
oikos. Por último, invítalos a un evento de alcance
en la célula o en la celebración.
¿Cómo te va en
el área de alcance de oikos, tanto a nivel personal,
así como en la enseñanza de estos principios a la
célula o en cuerpo de la iglesia?
** Fragmento extraído de
http://joelcomiskeygroup.com/blog_2/
|